Existen muchas definiciones de Marketing, algunas más complejas y confusas, otras más simples. La realidad es que es una disciplina que a simple vista parece sencilla de entender, pero a la hora de llevarlo a la práctica no siempre está muy claro.

El Marketing podría definirse como:

“Disciplina que utiliza un conjunto de herramientas y estrategias con el objetivo final de maximizar la rentabilidad de una empresa”.

En esta definición, realmente se puede identificar la verdadera importancia del Marketing. Ya que el objetivo máximo de una empresa es aumentar las utilidades, por lo que se debe crear un área en específico que estudie y realice acciones para lograr dicho objetivo.

Por eso la cantidad de ventas no es la métrica principal en marketing, como sí lo es la rentabilidad. Ya que aumentar las ventas no es la única forma de maximizar la rentabilidad de una empresa, por ejemplo también podemos: 

1. Aumentar el ticket promedio.
2. Automatizar procesos con herramientas digitales para reducir los costos operativos.
3. Reducir el costo por adquisición del cliente con buenas prácticas de customer service.
4. Vender la misma cantidad de productos pero a un precio mayor gracias a estrategias de branding y percepción de valor.

“Disciplina que estudia cómo resolver los problemas de un mercado o comunidad específica”.

El marketing sirve principalmente para solucionar los problemas de nuestros clientes, mediante productos y servicios que realmente aporten valor sustancial para mejorar sus vidas. Y aquí vemos nuevamente como las ventas no son el eje central de la definición de marketing, simplemente la facturación es una CONSECUENCIA y no un OBJETIVO de marketing.

Al final del día, el marketing es el acto generoso de ayudar a los demás a solucionar un problema … su problema